¿Alguna vez te has preguntado por qué ciertas marcas se te han quedado grabadas en la memoria? Esto es el resultado de una buena estrategia de marca combinada con la elección de un nombre que resuena y se posiciona en tu mente.
A menudo, cuando arrancamos un proyecto, tendemos a escoger su nombre guiándonos por las emociones o tendencias del momento. Sin embargo, en el mundo del branding, el naming no es solo una cuestión de creatividad, sino una decisión estratégica.
Un buen nombre puede elevar una marca, mientras que una mala elección puede limitar su potencial.
La importancia de un nombre descriptivo
En branding, el descriptor es un nombre de marca funcional que permite identificar fácilmente las principales cualidades de un producto. Son útiles, sobre todo, en mercados poco frecuentes, puesto que el público encontrará primero aquellos productos con un nombre genérico.
Por tanto, el descriptor influye significativamente en la percepción del consumidor de tu marca.
Un ejemplo es Apple, con nombres de productos como “iPhone” o “Apple Watch”. Estos productos han trascendido su funcionalidad para convertirse en símbolos de estilo de vida. Esto se refleja en el lenguaje cotidiano, donde “iPhone” a menudo sustituye a la palabra “móvil”.
Evita utilizar nombres comunes en el nombre de tu marca
Por otra parte, elegir un nombre común o genérico para una marca puede resultar peligroso. Estos nombres pueden dificultar el posicionamiento en buscadores y diluir la identidad de la marca.
Por ejemplo, una empresa llamada “Tigre” puede encontrarse compitiendo con resultados de búsqueda relacionados con el animal, en lugar de su marca.
El Naming en la era digital
En la era digital, el proceso de naming requiere considerar factores como SEO, disponibilidad de dominios y presencia en redes sociales.
Un nombre debe ser más que atractivo, debe posicionarse en los buscadores. Esto significa pensar en palabras clave y frases que tu audiencia puede utilizar para encontrarte.
También debe tenerse en cuenta la disponibilidad del dominio web. Un nombre genial que ya está cogido como URL puede llevar a confusiones o a una presencia online menos efectiva. La búsqueda de dominios debe formar parte del proceso de naming.
Del mismo modo, debe estar disponible en las principales plataformas de redes sociales. Esto asegura una marca coherente y reconocible a través de todos los canales digitales.
El naming es parte integral de la estrategia de marca. Un nombre bien elegido puede abrir puertas y crear una conexión con el público. Es esencial considerar todos los aspectos del naming para asegurar que su marca destaca en un mercado competitivo.
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